La frustración de Zverev durante su derrota en Wimbledon (REUTERS/Toby Melville)

La eliminación de Alexander Zverev en Wimbledon ante el francés Arthur Rinderknech en un duelo de cinco sets (7-6 (7), 6-7 (10), 6-3, 6-7 (7) y 6-4) ha dejado al número tres del mundo en una situación personal delicada, según reconoció el propio tenista en la rueda de prensa posterior al partido. Zverev abordó abiertamente su estado emocional, afirmando: “Sufro mentalmente”.

El jugador alemán, que este año alcanzó la final del Abierto de Australia, explicó que su malestar no se limita al ámbito deportivo. Cuando los periodistas le preguntaron por los cambios experimentados desde su paso por Melbourne, Zverev respondió: “Diría que más bien mental, probablemente. Es curioso, a veces me siento muy solo ahí fuera. Sufro mentalmente. Lo llevo diciendo desde después del Abierto de Australia. Sí, simplemente no lo sé. Estoy intentando encontrar maneras, intentando encontrar maneras de salir de este embrollo. De alguna manera, sigo volviendo a caer en él. En general, me siento bastante solo en la vida ahora mismo, lo cual no es muy agradable”.

Durante la rueda de prensa, Zverev, de 28 años, insistió en que su percepción de vacío trasciende el tenis. El alemán detalló: “No es una sensación de una pista de tenis, es simplemente una sensación de la vida en general. Como dije, nunca me había sentido así. No sé. Me cuesta encontrar alegría fuera de la pista ahora mismo”.

El número tres del mundo profundizó en su estado anímico: “He pasado por muchas dificultades en la vida en general. Nunca me había sentido tan vacío. Simplemente me faltaba alegría, simplemente me faltaba alegría en todo lo que hacía. No se trata necesariamente del tenis. Simplemente me faltaba alegría fuera del tenis también. Incluso cuando gano, como en Stuttgart o Halle, no es necesariamente la sensación que antes me producía, de felicidad, de motivación para seguir adelante. Simplemente no la tengo ahora mismo, y, repito, es la primera vez en mi vida que la siento”.

El alemán quiso dejar claro que sus palabras no pretendían restar mérito a la victoria de su rival ni justificar la derrota: “No es una excusa ni nada. Creo que Arthur merecía ganar hoy. No es nada. Es algo que he sentido durante los últimos meses. De nuevo, me siento muy, muy solo. No sé. Nunca me había sentido así. No tengo las respuestas en este momento”.

El testimonio de Zverev, quien al comienzo de la temporada pujó por quedarse con la cima del ranking mundial ante la suspensión por dóping de Jakin Sinner, pone de manifiesto la presión y el impacto emocional que puede acompañar a los deportistas de élite, incluso en los momentos de éxito. El europeo buscará dar vuelta la página y encontrar la inspiración necesaria para seguir dando batalla en el tenis, tras su doloroso tropiezo ante Arthur Rinderknech en su presentación en Wimbledon.